La estrella eslovena Luka Doncic anotó 20 puntos tan sólo en el primer periodo y terminó contribuyendo con 36 unidades en el partido, firmando su mayor cifra en esta postemporada, para que los Dallas Mavericks aplasten ayer jueves en la noche por 124-103 a los Minnesota Timberwolves, sellando su pasaje a las Finales de la NBA y convirtiéndose en los campeones de la Conferencia Oeste.
De esta manera, los Mavericks se impusieron por 4-1 en la final de conferencia y tendrán una semana completa de descanso antes del 6 de junio, cuando comenzarán las Finales de la NBA en Boston para enfrentarse a los Celtics, por su parte Dallas, quinto preclasificado del Oeste, aparecerá en la serie por el cetro de la NBA por primera ocasión desde 2011, cuando se coronó.
La parte más sorprendente de la marcha de los Mavs a través de los playoffs de la Conferencia Oeste: Dallas lo hizo con sólo vislumbres de la versión máxima de Luka Doncic, quien se ha visto afectado por un esguince en la rodilla derecha desde mitad de la primera ronda, y a lo largo de toda la postemporada ha encarado cada duelo con esta misma lesión mostrando grandes actuaciones y siendo decisivo en esta final de conferencia.
Doncic ciertamente ha sido una fuerza dominante: tuvo seis triples-dobles, anotó un triple ganador en el Juego 2 sobre Rudy Gobert, que es el momento característico de la racha de los Mavs y marcó el tono para la paliza final del Juego 5 al anotar 20 puntos en el primer cuarto, a pesar de tener dificultades con su tiro durante la mayor parte de las dos primeras ronda.
Ahora deberán enfrentarse a los Celtics, quienes ganaron 64 juegos durante la temporada regular, la mayor cantidad en la conferencia desde el Miami Heat liderado por LeBron James en 2012-13, y ese dominio se ha trasladado a los playoffs. Boston lideró la liga en rating neto por 4.4 puntos por cada 100 posesiones en la temporada regular y durante las primeras tres rondas de los playoffs.