Jorge Mario Bergoglio, la figura del Papa Francisco, cuyo reciente fallecimiento ha conmovido al mundo, se posiciona como un testimonio de una vida dedicada al servicio y la fe.
Hijo de inmigrantes italianos, Mario y Regina Sivori, su trayectoria desde las calles de Buenos Aires hasta el Vaticano es un relato de humildad y profundo compromiso.
¿Quién era Jorge Mario Bergoglio?
Nacido el 17 de diciembre de 1936, Jorge Mario Bergoglio, el primer Papa americano, demostró desde joven una inclinación hacia el servicio comunitario.

Antes de responder al llamado religioso, Bergoglio se graduó como técnico químico, una etapa que precedió a su ingreso al seminario diocesano de Villa Devoto, marcando el inicio de su camino eclesiástico.

En 1958, abrazó la vida religiosa al unirse al noviciado de la Compañía de Jesús, una orden que moldearía profundamente su visión del mundo y su ministerio.
Su formación intelectual y espiritual lo llevó a desempeñarse como profesor de Literatura y Psicología en dos colegios de Buenos Aires entre 1964 y 1966.

Este período como educador nutrió su capacidad de conectar con las personas y transmitir mensajes con claridad y empatía, cualidades que lo caracterizarían en su liderazgo pastoral.
Las imágenes de un joven Jorge Mario Bergoglio revelan un hombre de semblante afable y sonrisa cálida, una actitud que lo acompañó a lo largo de su vida, reflejando el espíritu de un pastor cercano y querido.

Ordenación sacerdotal
La ordenación sacerdotal llegó el 13 de diciembre de 1969, un momento crucial que lo encaminó hacia una ascendente carrera dentro de la jerarquía católica.
En 1973, fue nombrado provincial de los jesuitas en Argentina, un rol de liderazgo que puso a prueba su capacidad de gestión y visión estratégica.
El reconocimiento a su labor y dedicación se consolidó en 1992, cuando Juan Pablo II lo designó obispo titular de Auca y auxiliar de Buenos Aires.

Camino como cardenal
El Consistorio del 21 de febrero de 2001 elevó a Jorge Mario Bergoglio al rango de cardenal, trascendiendo así su liderazgo local y convirtiéndolo en una figura influyente más allá de la arquidiócesis debido a su carisma y cercanía con la comunidad.
Su visión y comprensión de los desafíos de la Iglesia lo llevaron a ser nombrado relator general adjunto para la décima asamblea general ordinaria del Sínodo de los obispos en octubre de 2001, un encuentro dedicado al ministerio episcopal.

Primer Papa latinoamericano
El histórico Cónclave del 13 de marzo de 2013, tras la renuncia de Benedicto XVI, marcó un hito al elegir a Jorge Bergoglio como Papa, a la edad de 76 años.
Su estilo de vida humilde y su cercanía con los fieles lo convirtió en una figura excepcionalmente querida.
Al asumir el pontificado, Francisco se convirtió en el primer Papa proveniente del continente americano. Sus mensajes y acciones han destacado consistentemente la importancia de la pobreza, la misericordia y la alegría, temas que él mismo expresó como centrales en su ministerio.
